Por pata coja entendemos que la máquina no está apoyada uniformemente en todas las patas. Otra expresión que puede haber oído es distorsión de la estructura de la máquina.
¿Por qué debemos comprobar y corregir la pata coja? ¿Tan grande sería el problema si hubiera un pequeño hueco debajo de la pata de una máquina o un pequeño montón de suciedad debajo de otra? Pues sí. Porque si la máquina no está perfectamente plana sobre la base, puede tener (y probablemente tendrá) problemas como la desviación del eje, aumento de vibraciones, fallos en los cojinetes y, como consecuencia final, la avería de la máquina. Y eso será mucho más caro que arreglar desde el principio el problema de pata coja. Por suerte, todos los sistemas de alineación de ejes Easy-Laser incluyen un programa de comprobación de pata coja que indica las patas que hay que ajustar y en qué medida.
Hay cuatro tipos de pata coja, pero todos tienen una cosa en común: una o más patas no se apoyan firmemente sobre la base de la máquina. Y hay diferentes motivos para ello. Veámoslos.
1. Pata coja en paralelo
La pata coja en paralelo (también llamada pata coja pivotante) significa que no todas las patas están en el mismo plano. Piense en una mesa de restaurante que puede balancearse de un lado a otro. En este caso, el software del sistema láser mostrará lecturas altas de pata (>0,05 mm) coja en las esquinas opuestas. Con una galga de espesores, podrá determinar qué pata o patas se deben ajustar y en qué medida.
Tres de las causas posibles de pata coja en paralelo:
- La pata es demasiado corta.
- La placa base o las bases de montaje no están sobre el mismo plano.
- Falta de galgas debajo de una, o varias patas de la maquina.
Para corregir una pata coja en paralelo, se añaden suficientes galgas para eliminar el efecto de balanceo (utilice el menor número posible y no más de cuatro galgas).
2. Pata doblada/en ángulo al exterior:
Es un tipo frecuente de pata coja que se presenta cuando la parte inferior de la pata está en ángulo con respecto a la base. En este caso, el sistema láser mostrará una lectura alta de pata coja en tres o cuatro patas. La pata con la lectura de pata coja más alta mostrará una holgura cónica de una esquina de la pata a otra.
Las causas de este problema pueden ser varias, por ejemplo:
- La maquinaria se ha caído o se ha manipulado bruscamente.
- Las placas base están dobladas o mal mecanizadas.
- Hay una gran desalineación angular vertical.
- Las patas están soldadas.
- El asiento se ha asentado.
La mejor forma de corregir este problema es mecanizar de nuevo las patas, la base o las dos cosas. Si no fuera posible, ir introduciendo galgas es una opción (aunque se debe tratar de evitarlo).
3. Pata inestable:
La pata inestable también se conoce como pata muelle. Con la pata inestable, la galga de espesores no detectará ningún hueco debajo de ella. Por el contrario, el problema suele ser que el espacio entre la pata y la base tiene demasiadas galgas de un intento anterior de resolver una pata coja. También puede haberse acumulado otro material no deseado, como suciedad u óxido, debajo de la pata.
Las causas de una pata coja inestable pueden ser:
- Suciedad, grasa, pintura u óxido entre la pata y la base.
- Demasiadas galgas (recuerde que no debe utilizar más de cuatro por pata).
- Galgas dobladas.
- Galgas con rebabas o marcas de rosca.
Para resolver este problema se debe limpiar a fondo la zona de alrededor y debajo de la pata, y sustituir las galgas antiguas por otras nuevas y resistentes al aplastamiento.
Aquí encontrará más información sobre buenas prácticas para colocar galgas.
4. Pata coja inducida:
La pata coja inducida está causada por fuerzas externas que afectan a la estructura de la máquina y que pueden ser difíciles de detectar. El sistema láser indicará más de una pata coja, normalmente en el mismo lado o en el mismo extremo de la máquina. La galga de espesores encontrará una holgura, normalmente paralela o casi paralela.
Algunas de las posibles causas de pata coja inducida son:
- Tensiones en acoplamientos o tuberías.
- Máquinas montadas en voladizo.
- Cargas generadas por correas o cadenas sobre poleas y engranajes.
- Conducto flexible excesivamente rígido.
- Refuerzos estructurales fijados a la máquina.
- Los pernos de elevación se dejan apretados por error.
Para corregir la pata coja inducida, deben eliminarse las fuerzas externas que causan el problema. Esto exige más de una comprobación de pata coja, ya que estas fuerzas pueden producirse en cualquier momento durante el proceso de alineación de ejes.
Un paso más cerca del funcionamiento sin problemas
Como dijimos al principio de este artículo, corregir la pata coja es esencial. Ninguna máquina está diseñada para trabajar sometida a tensión o con un elevado nivel de vibración, que son la consecuencia de la pata coja. Por ello, asegurándose de que todas las patas se apoyan firmemente en el suelo (o la base, en este caso), creará las mejores condiciones posibles para una alineación de ejes perfecta y un funcionamiento sin problemas.